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El Grupo del Banco Africano de Desarrollo ha lanzado los informes Country Focus, concebidos para profundizar en el diálogo político sobre los resultados macroeconómicos y las perspectivas de cada país y para servir de herramienta indispensable a los responsables políticos, los gobiernos y los socios para el desarrollo.
Los informes, en consonancia con el tema del informe Perspectivas Económicas de África 2024 titulado "Impulsar la transformación de África: La reforma de la arquitectura financiera mundial", profundizan en las dinámicas y perspectivas específicas de cada país.
El informe Perspectivas Económicas de África, que se publica anualmente, proporciona datos y análisis oportunos sobre el crecimiento del continente, lo que permite a los responsables políticos africanos tomar decisiones con conocimiento de causa.
Los resultados y las perspectivas de crecimiento varían entre los 54 países africanos del informe, lo que refleja diferencias en la estructura económica, la dependencia de los productos básicos y las políticas.
Los informes 2024 evalúan las experiencias de cada país a la hora de acceder a la financiación necesaria para financiar su transformación estructural y piden una revisión de la arquitectura financiera mundial para ayudar a dar un giro a las economías africanas.
El Prof. Kevin Chika Urama, Economista Jefe y Vicepresidente de Gobernanza Económica y Gestión del Conocimiento del Grupo del Banco Africano de Desarrollo, ha declarado: "Los informes formulan recomendaciones audaces para financiar la transformación estructural a nivel nacional mediante reformas de la arquitectura financiera mundial que respondan mejor a las crecientes necesidades de financiación del desarrollo de los países africanos, exacerbadas por las recurrentes perturbaciones mundiales y nacionales."
Los 54 informes documentan las necesidades y lagunas de financiación, así como las insuficiencias del actual sistema financiero mundial para apoyar la transformación estructural de África hasta 2063. Los informes formulan recomendaciones en cinco áreas clave:
Aprovechamiento de la financiación del sector privado: El sector privado seguirá siendo un socio clave en la financiación de las economías africanas. Los países deben permitir una mayor participación del sector privado en la economía para complementar las inversiones públicas, especialmente en áreas con un alto rendimiento social, como la acción por el clima y el desarrollo del capital humano.
Aumentar lafinanciación para el clima: Los países africanos son los que menos contribuyen a la crisis climática y, sin embargo, son los más afectados. Será fundamental reformar la arquitectura mundial de la financiación de la lucha contra el cambio climático para reforzar la coordinación y facilitar el acceso de los países africanos a dicha financiación.
Reformar los Bancos Multilaterales de Desarrollo (BMD): Los bancos multilaterales de desarrollo deben revisar sus modelos de negocio para proporcionar financiación a largo plazo en condiciones favorables a gran escala a los países africanos. Deben reforzar sus posiciones de capital, trabajar en la recanalización de una parte de los Derechos Especiales de Giro (DEG) del Fondo Monetario Internacional y garantizar que los países más necesitados reciban la mayor parte de la financiación.
Reformar los mecanismos de resolución de la deuda: Los actuales mecanismos de resolución de la deuda, como el Marco del G20, no responden demasiado a las necesidades de los países africanos que los necesitan. Los informes recomiendan reformas radicales para una rápida resolución de la deuda y una gestión sostenible de la misma, incluyendo soluciones innovadoras basadas en el mercado, alivio de la deuda para la acción climática y sistemas de autoridad de la deuda soberana.
Mejorar la movilización de recursos internos: Los informes instan a los países africanos a mirar hacia dentro para financiar su transformación estructural. La importancia de reforzar la movilización de los ingresos nacionales mediante la mejora de las políticas fiscales, el aumento de la eficiencia en la recaudación y utilización de los ingresos públicos, la lucha contra los flujos financieros ilícitos y la evasión fiscal, y el aprovechamiento de los abundantes recursos naturales de África seguirá siendo clave.
En resumen, estos informes contienen políticas pragmáticas (a corto, medio y largo plazo) para acelerar el crecimiento económico y la transformación estructural de los países africanos. También proporcionan a los gobiernos y a los posibles inversores datos actualizados y precisos para fundamentar las decisiones políticas y de inversión.